Una crema muy usada en el mundo de la repostería. Combina muy bien con muchos tipos de dulces y postres. Un relleno muy versátil que hará las delicias de cualquier goloso.
Es de rápida y fácil elaboración. Se aromatiza tradicionalmente con vainilla, pero hay muchas variantes como canela, cacao, café, cáscara de naranja o limón, etc.
Dificultad: fácil
Ingredientes:
3 dl de leche – 4 cucharadas soperas de harina – 4 cucharadas soperas de azúcar – 2 huevos – ½ vaina de vainilla.
Primero ponemos a calentar la leche con la vaina de vainilla (la cortamos a lo largo, para que salgan las semillas).
En un bol ponemos la harina y el azúcar. Seguidamente añadimos los huevos.
Batir con la varilla hasta que esté todo bien mezclado.
Al primer hervor de la leche, la apartamos del fuego y quitamos la vainilla. La echamos al batido de harina, azúcar y huevos, sin dejar de mezclar.
Volvemos a incorporar todo a la cacerola. Ponemos a fuego suave y no dejamos de remover hasta que espese.
Dejarla enfriar en el frigorífico poniendo un film transparente para que no se reseque.
Es una crema perfecta para rellenar cualquier dulce.
La cacerola mágica 