Podéis sustituir el jamón serrano por salmón, os quedará de lujo.
Un entrante refrescante que os recomiendo para estos días de calor, por lo sencillo que es de elaborar. El resultado es un cremoso y delicioso brazo de gitano salado.
Dificultad: fácil
Ingredientes:
400 gramos de calabacín rallado – 3 huevos – 50 gramos de harina – 7 gramos de levadura en polvo – 2 cucharadas soperas de nata – 200 gramos de queso de untar – 6 lonchas de jamón serrano – sal.
Después de rallar el calabacín, lo sazonamos y lo dejamos en un colador para que suelte el agua, una media hora.
Separamos las 3 claras y las montamos con la varilla.
En un cuenco mezclamos las 3 yemas, la harina y la nata.
Seguidamente añadimos el calabacín y las claras, mezclamos con movimientos envolventes.
Vertemos en la bandeja, previamente cubierta con papel de horno.
Calentar el horno a 200 grados y hornear unos 15 minutos. Dejar enfriar.
Con una espátula untar el queso sobre toda la superficie y colocar las lonchas de jamón serrano.
Con mucho cuidado enrollamos.
Le ponemos un film transparente y lo dejamos reposar en el frigorífico unas 4 horas.
Solo queda partir en lonchas y degustar. Ya me contaréis si os ha gustado.
La cacerola mágica 